CONTEXTO ECONÓMICO

CONTEXTO ECONÓMICO:


Imagen relacionadaEn el ámbito económico, España se encuentra entre los años 1951 y 1951 aislada ya que quedó al margen de la ayuda norteamericana que iba a recibir Europa a través del Plan Marchall, la población española sufrió años de penuria y desabastecimiento de productos, especialmente agudo para las clases humildes. Pero es en 1953 cuando se firman unos acuerdos con Estados Unidos para que se estableciesen en España diversas bases militares norteamericanas debido a su lucha contra Rusia (La URSS), esto, junto con la firma con el Papado del Concordato que hizo posible la entrada en España en las Naciones Unidas supuso el fin del aislamiento internacional.

Esta ayuda norteamericana significó un cambio en la línea económica del gobierno de Franco pues fue necesario pasar de la autarquía a una economía liberal, aun en contra de los principios de Falange, que se aferraban al sistema autárquico. El cambio en la política económica fue dirigido por los llamados ministros “tecnócratas”, como Navarro Rubio o López Rodó, muchos de ellos miembros del Opus Dei.

El apoyo de EEUU posibilitó un gran crecimiento económico, pero este provocó diversos desajustes, como el aumento de la inflación y el desequilibrio de la balanza de pagos. Por ello, en 1959 se puso en marcha el denominado Plan de Estabilización Económica, que consistió en:

· Una política de saneamiento económico y de crecimiento industrial, para lo cual se frenó el crecimiento económico dejando caer a las empresas poco rentables, a las que se negó ayuda, y se relanzó la economía con las empresas más rentables y saneadas, que impulsarán el crecimiento económico.
· Controlar la inflación y el déficit comercial, y frenar los gastos y la demanda.
· Fomentar las exportaciones e importaciones, así como las inversiones extranjeras.

El plan, que se mantuvo hasta el año 1962, tuvo un notable éxito pero a costa de sacrificios de la población ya que provocó un crecimiento masivo del paro, que fue absorbido por la demanda de trabajadores que existía en Europa, dando origen a una importante salida de emigrantes hacia el exterior.

La herramienta principal para fomentar el desarrollo económico consistió, a partir de 1964, en los planes de desarrollo impulsados por el ministro López Rodó. Los Planes tenían un carácter indicativo, y significaron la organización de la actividad económica por el Estado, que se convirtió así en el planificador de la economía, asumiendo la creación de empleo, impulsando obras públicas, concediendo créditos a las empresas y decidiendo qué sectores había que potenciar. Se sucedieron desde entonces tres planes cuatrienales (1964-67; 1968-71; y 1972-75), aunque este último se vio interrumpido por la crisis del petróleo de 1973. Sus principales logros fueron los siguientes:

· Creación de los polos de desarrollo, áreas industriales en torno a las principales ciudades, en los que se impulsó la industria pesada y la de bienes de equipo. Como consecuencia, en estos polos se produjo un notable crecimiento urbano, resultado de la demanda de viviendas y del crecimiento del sector de la construcción.
· Política de subvenciones, con créditos baratos y primas a la producción y a la exportación, que no obstante generó diversos casos de corrupción, como los de MATESA (1969, cobro de subvenciones a exportaciones falsas) y SOFICO (1974, captación de fondos sobre ventas de apartamentos no construidos).
· Aumento del consumo interno, pues aunque los salarios no aumentaron demasiado, se generalizó el pluriempleo y aumentó el bienestar material de las familias.
· Crecimiento de las exportaciones, gracias al Acuerdo Preferencial suscrito con la Comunidad Económica Europea.
· Desarrollo de la industria, lo que permitió que España pasara de ser un país exportador de productos agrícolas y de materias primas, a exportar también manufacturas industriales (maquinaria, herramientas, barcos….).

El crecimiento económico se vio facilitado por diversos factores como la bonanza económica europea, el auge del turismo, que convirtió a España en uno de los principales destinos y aportó abundantes divisas, la emigración española a países europeos, que también proporcionó gran cantidad de divisas, así como las inversiones de capital extranjero. En cuanto a las consecuencias del desarrollismo podemos destacar las siguientes:

· Aumento demográfico, pues la población pasó de 30´3 millones de habitantes en 1960 a 33´9 millones en 1971, a causa de la elevada natalidad y al descenso de la mortalidad.
· Aumento de la población urbana, pues se acentuó la emigración del campo a la ciudad, con la consiguiente despoblación de las áreas rurales. A excepción de Madrid, el interior de la Península sufrió el despoblamiento en favor de las zonas costeras, principalmente Cataluña, País Vasco y Levante.
Imagen relacionada
· La sociedad española se modernizó, pues aumentó la renta per cápita, mejoró el nivel de vida y se incrementó el consumo (vivienda, automóvil, electrodomésticos…), al tiempo que la juventud accedía masivamente a la educación y participaba en la rebeldía y modas de la juventud europea. Igualmente, la mujer participó más activamente en el mundo cultural, en la Universidad, etc…y se fue incorporando poco a poco al mercado laboral.
· Se generaron contrastes económicos entre unas regiones y otras, entre una España industrial y desarrollada (Madrid, País Vasco, Cataluña…), y otra agrícola y atrasada (áreas rurales del interior peninsular, de Extremadura, Andalucía…).
· Se produjeron ciertas dificultades de las zonas receptoras de población, pues la llegada de inmigrantes y la falta de infraestructuras originó un crecimiento descontrolado en la periferia de las grandes ciudades, produciéndose fenómenos de marginación y chabolismo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

EDUCAR DE GABRIEL CELAYA

EL IDEAL FORMATIVO Y LOS MAESTROS

PRESENTACIÓN DE GRUPO